EL TESTIGO INVISIBLE // CARMEN POSADAS

EL TESTIGO INVISIBLE

Carmen Posadas

Llegó a conocer los secretos de la familia imperial rusa en sus últimos años, El testigo invisible.

Leonid Sednev comenzó a trabajar como deshollinador, a muy temprana edad, en las chimeneas y conductos de calefacción de los palacios del Zar Nicolás II de Rusia. Conoció y convivió con toda la familia Romanov. Trabajó y ayudó a la gente que junto a los zares y sus hijos, vivían en la corte. Fue testigo invisible de la vida secreta de las últimas duquesas Romanov. Y antes de morir, desea revelarlo todo.

RESUMEN

Leonid Sednev, deshollinador imperial y más tarde pinche de cocina, tenía quince años la noche del 17 de julio de 1918, cuando un grupo de militares de la Revolución bolchevique asesinó brutalmente a la familia imperial rusa.

Leonid fue el único superviviente y testigo invisible de la tragedia.

Mucho tiempo después, un Leonid y anciano decide recomponer sus recuerdos y comienza este relato, desde los ojos del sirviente de la familia imperial, con el que recrea los últimos años del Imperio ruso y e cambio de régimen.

Carmen Posadas nos sumerge, con su habitual maestría, en el fascinante mundo de la familia imperial rusa: luces y sombras de palacio, en un desfile de princesas y deshollinadores, zares y bolcheviques, lujo y miseria.

BOOKTRAILER

VALORACIÓN

En esta novela histórica, gracias a las líneas de Carmen Posadas, nos “colamos” dentro de los palacios de la familia imperial rusa. Paseamos por sus amplios salones, nos recreamos con un sinfín de obras de arte que atesoran los zares. Curioseamos sus dormitorios, incluso, gracias al protagonista de la obra, llegamos a cotillear los diarios y cartas de las duquesas Romanov.

En la portada del libro, encontramos unas puertas de madera blanca, ornamentadas con detalles en dorado y figuras angelicales, típica decoración de palacios rusos de los siglos IXX y XX. A día de hoy, esta decoración, se siguen respetando en lugares como el palacio de Peterhof en San Petersburgo.

Imagen del interior del Palacio Peterhof (San Petersburgo).

Y tras una de esas puertas, o paneles de madera blanca ornamentada, se esconde un niño. Este, no es otro que el pequeño Leonid, El testigo invisible.

Recomiendo la lectura de la novela y la investigación propia, con la ayuda de Internet, de los diferentes palacios y lugares de los que habla el protagonista. Son auténticas maravillas y preciosos escenarios para tan terribles hechos históricos.

Esta es la tercena novela historia publicada hasta la fecha por la escritora Carmen Posadas.